TETELESTAI

 El análisis del uso de la palabra griega "τελέω" (teleō) y su forma perfecta "τετέλεσται" (tetelestai) en el contexto bíblico, particularmente en la narrativa de la crucifixión y la obra redentora de Jesús, nos lleva a una comprensión profunda de lo que significó este momento en la historia de la salvación. La última declaración de Jesús en la cruz, "τετέλεσται", no solo marcó el fin de su sufrimiento físico sino que también señaló la culminación de la obra redentora predestinada por Dios, cumpliendo las profecías y las exigencias de la ley mosaica hasta ese instante.

Definición de "τετέλεσται" (tetelestai) en el contexto de la redención:

Esta expresión significa "está terminado", "se ha completado" o "se ha cumplido". En el ámbito de la pasión de Cristo, encapsula la finalización de varias facetas de la misión mesiánica de Jesús hasta el momento de su muerte:

1. Cumplimiento de las Escrituras y las Profecías: Jesús, en su muerte, cumple meticulosamente las profecías del Antiguo Testamento, incluida la del Salmo 22:1, que expresa una pregunta ante el abandono ("Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?"), citado por Jesús en la cruz según los Evangelios Sinópticos. Este Salmo, aunque comienza con una pregunta que refleja sufrimiento y desamparo, anticipa la victoria y la redención. La respuesta de Jesús con "τετέλεσται" no solo confirma el cumplimiento de estas profecías sino que también señala hacia la respuesta divina a esta pregunta de abandono, marcando la transición del sufrimiento a la gloria.

2. La Obra Redentora hasta la Cruz: Hasta el momento de su muerte, Jesús había cumplido todos los requisitos para la salvación de la humanidad: su enseñanza, su vida sin pecado, su sacrificio expiatorio. "τετέλεσται" anuncia el complete cumplimiento de las promesas dadas por Dios a través de todo el Antiguo Testamento.

3. Transición hacia la Resurrección y la Entronización: Si bien "τετέλεσται" marca la consumación de la obra salvífica en la cruz, la narrativa de la redención no concluye ahí. Según Hebreos 9 y otros textos del Nuevo Testamento, todavía quedaba por cumplir la resurrección y la entronización de Jesús para completar plenamente la obra de redención. Estos eventos posteriores son esenciales para la fe cristiana, ya que la muerte de Jesús sin pecado implica su triunfo sobre el pecado y la resurrección es la confirmación de la victoria sobre la muerte y el pecado, y la entronización de Jesús como Señor y Cristo (Hechos 2:36) es la culminación de su obra redentora, asegurando su intercesión continua y el envío del Espíritu Santo.

En conclusión, "τετέλεσται" encapsula tanto la finalización de la misión mesiánica de Jesús en la tierra hasta el momento de su muerte como la anticipación de lo que aún estaba por venir en el plan divino de salvación. Este término refleja una victoria total sobre el pecado y que anticipa una victoria completa sobre la muerte y satanás, abarcando tanto el cumplimiento de las profecías como la revelación de la Justicia de Dios a través del Evangelio, ya que apunta hacia la resurrección y la entronización de Jesús, elementos con los cuales la obra de la eterna redención estaría completa (Hebreos 9:12).